Fermentando branding para el mundo del vino.
He salido de La Rioja para buscar ideas inspiradoras en torno al mundo del vino. La tierra en la que vivo es un gran referente mundial en la elaboración y comercialización de este noble caldo, pero todos sabemos que la competencia es muy dura en este sector.
El vino es mucho más que vino. A estas alturas es muy difícil destacar sólo con un buen producto. Desde hace décadas se viene fomentando la cultura del vino y el sector ha invertido muchísimo para crear marcas que proyecten una imagen y valores excepcionales. El branding y el enoturismo, hoy por hoy, son esenciales para lograr estos objetivos.
En esta búsqueda he dado con dos trabajos realizados por el Estudio Pablo Guerrero que han llamada mi atención. Esta empresa de León, especializada en branding, tiene un largo portfolio de trabajos en torno al mundo del vino, pero a mi me gustaría destacar dos de ellos que han dado solución a necesidades completamente diferentes.
TOXO, una experiencia estética y táctil para un vino de autor.
Toda la presentación en botella es excepcional, desde su botella borgoñesa, pasando por su capsula de estaño negra asimétrica, hasta su etiqueta de doble componente. Es precisamente su etiqueta lo que más llama su atención.
Se trata de un collage, original de la artista gallega Pilar Alonso, que sirve tanto de interpretación poética como de punto de partida a partir del cual la etiqueta construye dos niveles de transmisión: una base de papel impreso ligeramente texturizado abajo, con una superposición troquelada de fieltro negro y tacto aterciopelado en la parte superior. La nomenclatura y la sobriedad de la etiqueta también encajan con el origen sostenible de este tinto de Mencía.
WINE FOR HOME, colección bag-in-box para consumo cotidiano.
De un vino exclusivo a un vino de mesa de uso cotidiano. La misma agencia evita imitar los atributos más tradicionales y solemnes de los vinos de gama alta. Al contrario: conecta con los compradores en un lenguaje sencillo y directo, libre del peso del pasado.
El objetivo para esta serie de Bag-in-Box era expresar —en estilo urbano, divertido, colorista y cosmopolita— los valores de este vino, concebido para el uso doméstico. El naming, el formato, la tipografía y el aspecto general contribuyen a crear un producto para casa, atractivo y original… destinado a consumidores que no buscan (en este caso) ese otro estilo elaborado o inspirado en la nobleza, de bebidas más sofisticadas.
Una colección de cajas (Rosado, Blanco y Tinto) para consumo cotidiano para la Bodega Cooperativa Cigales (Valladolid), que sin duda no pasa desapercibida y que cuenta un certificado especial como Finalista — Wine Collection — Pentawards 2023.
Fuentes: Estudio Pablo Guerrero, Olga Verde Viñadora, Packaging Of the World
